ALCAZ es joyería contemporánea, donde líneas netas, formas limpias, volumen, piedras naturales, plata y oro van hacia la búsqueda de la armonía entre la pieza y quien la va a llevar puesta, complementando nuestro estilo con el propio.

TODO TE DEJA EVOLUCIÓN Y CRECIMIENTO

(Silvana Chiavetti Segunda entrega)

Su exploración por distintas ramas del conocimiento y del arte le han permitido construir un criterio a la hora de elaborar piezas. Todo lo que ha experimentado y estudiado se ha convertido en un aporte a su modo de trabajar.

 ¿Qué labor te produce más placer la enseñanza o el aprendizaje?

Las dos. Ser alumna a mí me produce mucho placer, es muy descansado, porque yo no soy la que tiene que responder, otro me responde a mí o me ayuda a aprender a construir las preguntas. De cada clase me voy flotando.
Por otro lado, dar clases es como para una banda de rock hacer un recital frente a 30 mil personas. Es emocionante, yo no podría dejar de dar clases. Cuando estoy en aula y empiezo a ver lo que el otro es capaz de hacer, empiezo a sentir una ansiedad tremenda hasta que el otro se da cuenta de sus capacidades. Me asombra el alumbramiento de lo que el otro hace. Es milagroso. Estoy permanente abriendo puertas y viendo milagros.
En especial, el adulto viene con una carga muy fuerte de volver a estudiar. Es un ambiente heterogéneo, hay mucha gente que viene del trabajo doméstico, es ama casa, albañil, ingeniero, jubilado, sereno. Al principio, hay una especie de escozor de ser evaluado y calificado, y muchas veces hay un apoyo familiar muy importante y en  otras, una denostación muy marcada: “¿Ahora se te ocurre la escuelita?” o “Si tenés tiempo buscáte otro trabajo y trae más plata” Tienen que luchar con un montón de cosas, además del prejuicio propio. Hasta que se desprenden de ese saco de plomo y empiezan a funcionar, y es maravilloso. A mí me da mucho gusto. No me quiero perder un día con los alumnos.

En cuanto a la joyería en especial, que herramientas te dio para tu trabajo tu paso por la Facultad de Agronomía?

Allí hay una capacitación muy fuerte en lo que es Matemática, Física, Química, Estadística, y Economía, lógicamente orientado a lo que es agrario. La parte de Matemática y de Física a mí me ordenó para estudiar, tener esquemas, una organización en lo que es el estudio y la visualización de los problemas. La estadística te da la posibilidad de hacer muestreos y de ver a través de la experimentación cuáles son los resultados posibles, y la parte de química te abre un espectro en cuanto a materiales, reacción de esos materiales, en cuanto a lo que unís. Todo lo que estudié lo uso muchísimo.
Por ejemplo, el paso por el teatro me dio la posibilidad de manejarme en público como no te lo da otra actividad, eso lo aplico en la docencia y también en pedagogía; recorro el aula de una manera determinada, modulo, hago silencios. No estar desde un lugar cerrado y separado del otro sino en un lugar hermanado con lo público.
La danza te da la experiencia abarcar el espacio con tu cuerpo, vos sos una cuestión conjunta con el espacio, lo circundás, lo atravesás.
Es todo útil, por ejemplo, a mi me descansa mucho el trabajo de la casa, limpiar platos, ordenar, el abrir una heladera y pensar con lo que hay qué hacer, conformar y dar placer, es una de las artes más completas, porque se está abarcando visión, sabor, ingenio, olor y además estás nutriendo. Es magnífico. En la joyería pasa eso también, lo que uno forma es un criterio. Tengo estas piedras y este metal: puedo hacer estas piezas.

¿Qué les dirías a aquellos que quieren hacer joyería?

Yo conté que tenía toda una carrera hecha en pintura, era exclusiva de cuatro galerías de arte, quise hacer joyería, hice joyería.
Les diría que hagan, lo que sea háganlo. Aunque se equivoquen, lo peor es no haber hecho algo y quedarse con la duda. La vida es un tiempo muy fugaz, que no debe perderse en estupideces. La duda, es una estupidez. Las cosas hay que hacerlas, pueden salir bien o mal, esto no importa en realidad. Lo que importa es la experiencia, todo te deja evolución y crecimiento. Yo en todas las cosas que hago fracaso constantemente, me embarco en muchas cosas que no salen como yo las soñé. Soy experta en fracasar. Y es bueno, porque uno sabe qué es lo que no hay que hacer en el próximo proyecto. Uno no tiene que ser irrespetuoso con la vida y no vivirla. Es un juego que hay que tomarse seriamente, no solemnemente, pero es un juego. Ganar, perder, juntar dinero, tener un premio, que te aplaudan, la montaña de billetes, son parte de un juego, de algo efímero, que no existe. Porque cuando vos estás solo con vos mismo, todo eso es nada, te queda lo que sos vos. Lo más importante es el amor, a tu laburo, a tu gente a tus amigos, el amor a lo que hagas. 
Si alguien quiere hacer joyería, que haga joyería, va a encontrar su lugar, sino lo encuentra que lo invente, cuando empecé en Buenos Aires no se hablaba de diseño de joyas como hoy, había dibujantes pero no diseñadores, no existían. No había y yo lo hice, si no hay hacelo. Si no lo hacés por vos hacelo por el que viene atrás. Si yo pude puede cualquiera.

UN TALENTO PARA ATESORAR

Humilde, pensante, apasionada. Silvana Chiavetti es artista plástica. Su desempeño como tal la llevó más allá de lo que sus sueños, alguna vez, le auguraban. Fue precursora del diseño de joyas en Argentina. En el seno de una familia de artistas, un padre pintor y una madre bailarina, Silvana eligió el arte como forma de vida.
Se la ve espontánea, transparente, elocuente. Sorprende su humor, su calidez, su don de gente.

“Por Argentina a muerte, porque Argentina es mi tierra”

Silvana comenzó a incursionar en joyería luego de haberse tomado dos años sabáticos como descanso tras haber participado de una producción de pintura muy fuerte durante cuatro años. Su enfermedad “conveniente”, la hiperkinesis, le había permitido trabajar durante diecisiete horas diarias: “Llegué a dormir una hora al día porque se me ocurren cosas permanentemente y las hago, pero esto, si no está regulado, puede ser un problema”.
Su pasión por inmiscuirse en su propia cultura, la condujo a recorrer en profundidad la Ciudad de Buenos Aires. “Siempre me llamó la atención que la gente se fuera a otro país a conocerlo a fondo o a otra ciudad que no le era propia. Me maravillé con la cantidad de barrios alucinantes de Buenos Aires, debido a las diferentes corrientes inmigratorias que hicieron de cada zona de la ciudad una estampa de su país de origen.” Pero luego de investigar cada rincón de su lugar de pertenencia, Silvana comenzó a explorar la joyería.
“Yo ya era profesora nacional de Bellas Artes cuando decidí incursionar en el rubro joyero. Fui a la Escuela de la Joya y allí tuve la dicha de tener a los maestros fundadores por los que sentía admiración total. Con ellos, aprendí las bases de la joyería desde una mirada adulta profesional.”
Su interés por bucear en otra disciplina del arte surge del contacto con su propia familia. “Las joyas me fascinan, siempre me gustaron. Una de mis abuelas, Florinda, usaba cantidades impresionantes de joyas. Lucía colgantes, varias pulseras de platino, diamantes y rubíes. Yo crecí colgada de ella mirando todo eso y me parecía que así debía ser el arreglo de todo el mundo. La conexión con la joya me surge de ahí y también del contacto que tuve con la joyería de teatro en las épocas en que mi madre era bailarina del Colón. Mi hermana y yo nos pasábamos la mitad de la semana dentro del teatro. Allí, pude ver en los camarines cómo se hacían los arreglos, analizar la joyería teatral y los trajes. La joyería teatral tiene que tener además del lucimiento, determinadas características para que la persona que la vaya a usar pueda realizar los movimientos con total libertad sin tener ningún inconveniente, ni ninguna pérdida de la pieza. Deben tenerse pautas para la construcción. Desde qué distancia va a ser vista, el peso de las piezas, si va a haber luces color (porque el color de la piedra va a variar de acuerdo al color de luz que reciba), qué personajes serán los más relevantes y por tanto llevarán más y mejores joyas.”
Su paso por la joyería no fue silencioso. El empeño por superarse y superar las condiciones de aprendizaje vigentes, la condujo a desarrollar un programa de estudios de dibujo técnico aplicado a la joyería, inexistente hasta el momento en el país.
“Ingresé a la escuela, pero no me dejaban cursar Dibujo ni Historia porque ya las tenía aprobadas al haber hecho mis estudios en Bellas Artes. Por lo cual el director me tuvo todas las tardes rogándole que me permitiera asistir a clase. Yo consideraba que Bellas Artes tocaba una determinada mirada de la estética, y la joyería tiene una técnica particular, entonces no pueden ser estudiadas de la misma manera. Finalmente, vencido por mi insistencia me mostró el único programa que había, que era un programa de Caligrafía, ante el cual me quedé tiesa. Yo esperaba un dibujo técnico para joyería porque estamos hablando de construir objetos que van a ser usados, entonces hay que tener en cuenta espesores, alturas, pesos.”
Su fervor y amor al trabajo la condujeron a alcanzar un objetivo más en su larga lista de logros. Durante ese verano compró todo lo que encontró de dibujo industrial. Tras largas jornadas de estudio, finalmente creó el Programa de Estudios de Dibujo Técnico aplicado a joyería. Proyecto que no sólo fue un éxito en el momento, sino que incluso permanece hoy en día vigente en la Escuela de la Joya. Cada tanto lo va aggiornando de acuerdo a los avances tecnológicos. “De esta forma, me fui involucrando cada vez más en el campo de la joyería y se fue convirtiendo en mi modo de vida, no sólo económicamente sino en todo sentido.”

“Es el significado, el significante, el símbolo, es un mandato”

Es un concepto sabido que a través de la obra de arte se busca expresar algo. ¿Qué expresás a través de la joyería?

Es un eje lo que acabas de decir. Cualquier expresión humana ya sea culinaria, indumentaria, atención al público, joyería, pintura, lo que sea, siempre conlleva un mensaje aunque no se desee. Cuando estás haciendo un diseño, armando una pieza, con lo que hacés estás diciendo al menos lo que te pasa. A veces uno intencionalmente puede querer expresar una idea o una ideología, llevar un mensaje, bajar una línea o enrostrar tal cosa. Pero cuando vos trabajás para otro es como cuando hacés teatro, tenés que meterte en el otro, estudiar ese personaje, reconocer sus características y actuar. Tenés que lograr meterte en la cabeza del otro y diseñar como si fueras el otro. Y así es que te encontrás haciendo cosas que no harías en absoluto. Es muy atractivo.

¿Qué hace especial a la joyería como arte plástico que la diferencia de los demás?

La diferencia es que la joya al ser llevada por una persona y convertirse en la presentación o el distintivo de la misma, completa su imagen, es un ser con la persona: una joya en sí misma. La coloca en lugar de emocionalidad que no lo tiene otro tipo de arte, te está diciendo qué es el otro, o qué quiere que vos pienses. Lo que hace todo objeto que yo me ponga es que la otra persona, indefectiblemente, me mire, que su atención se capture y esté observándome. Todo ese tiempo que me está observando, a mí me sirve para mostrarle quién soy, para hacerle ver mi adentro. Es la puerta para que el otro me conozca.
Cuando vos estás frente a una persona que tiene joyería tradicional te está dando la información de que por lo menos en ese momento tiene una actividad o comportamiento convencional. Pero cuando esa misma persona se va de vacaciones y se pone otro tipo de adornos personales, está anunciando que está dispuesta a otro tipo de actividades, más libres.
Eso es lo que tiene la joyería como tarjeta de presentación, como anuncio que no tiene otro arte. Es una mano extendida diciéndote quién es el otro.

¿Con respecto a la concepción histórica de las joyas como un emblema de poder, para vos se ha ido perdiendo?

Hay que tener en cuenta que hay muchos tipos de joyas. No específicamente la joyería distintiva de jerarquía, de marqués, rey, pero la joya sigue siendo un “instrumento de poder”. La joya es un artículo o producto de primera necesidad emocional y psicológica, y no de primera necesidad material o biológica. Sigue siendo instrumento de poder, dado que cuando alguien está usando joyería, está ejerciendo el poder de atraer el otro, el observador hace una lectura circular todo el tiempo y la joya está como un faro llamando la atención.
Además, históricamente, los hombres se colgaban elementos como, conchillas, colmillos, a través de los cuales estaban diciendo “Yo cacé este animal”, prueba rotunda de poder. Esto, hoy sigue siendo igual, regalar una joya como ofrenda a otra persona, significa, en realidad, regalar la prueba de lo que uno puede. Es una expresión de tradición, de fe, de relaciones. Es el significado, el significante, el símbolo, es un mandato. (Continúa en proxima entrega)

PLACERES COSMOPOLITAS

Sitio de encuentro: Juncal y Oro. Se presta al chiste fácil cuando el motivo de nuestra salida es una visita a una muestra de joyería. Un evento que convoca a joyeros de toda la República. Un lugar en el que confluyen tendencias mundiales y regionales en el arte de trabajar los metales y las piedras.
Luego de acreditarnos en esta edición de BairesJoya, atravesamos la puerta de entrada y nos sumergimos en una suerte de laberinto de pasillos con vitrinas de exposición. A simple vista se observan compartimentos clasificados por marcas. Cada firma adorna su espacio de un modo particular, acorde a las alhajas que exhibe. Colgantes tradicionales, corbateros originales, esclavas, anillos, pulseras. Inevitablemente, la imagen en la retina se torna brillante y no es casualidad: el magnífico poder hipnotizante de las joyas cobra protagonismo. Se lucen objetos de corte contemporáneo y clásico, pero no cabe duda que el foco del evento está puesto en aquellas piezas que marcan tendencia.
Tras una recorrida minuciosa por el total de la feria, nos detenemos frente a una vitrina que expone piezas de una delicadeza admirable. Se trata de unos minúsculos eslabones brillantes de múltiples colores. Un hombre se arrimó al ver mi curiosidad y me nombró esos famosos accesorios: las “donas”. Estos pequeños redondeles se hacen ver no solo por sus exquisitos brillos en miniatura, entre sus otros atributos figura su creativa multifuncionalidad. Las donas otorgan el privilegio de ser usadas como dijes de colgantes, pulseras e incluso anillos, y tienen el beneficio extra de poder combinarse según los gustos o cambiarse de acuerdo a la ocasión.
 En lo que concierne a los visitantes, muchos acuden con el fin de aggiornarse con  respecto a las vanguardias que rigen a nivel nacional e internacional. Otros, asisten directamente para adquirir joyas y luego revenderlas al público de su lugar de residencia. Se respira un aire agradable y festivo. Somos convidados con algunos bocaditos salados y refrescos. Mis ojos se desvían hacia un hombre de unos sesenta años que se aproxima rápidamente a una bandeja. Evidente ansiedad por degustar menúes tales como la típica picadita compuesta por exquisitos fiambres acompañados de panes saborizados antes de que sean devorados por otros.
Otro eje innegable de la feria lo constituyen los diseños exclusivos a cargo de artistas de todas las edades que a través de la fusión de diversos materiales y de su inventiva profesional, alcanzan ejemplares de una distinción memorable. En sus obras se traduce una aguda sensibilidad, se deja ver sutilmente, la “cristalización de sus sensaciones”. Entre los diseños más extravagantes, aparecen colgantes con dijes cuyas partes pueden separarse, de modo tal que cada día puede lucirse un colgante aparentemente diferente.
Sin lugar a dudas, nuestro paso por el evento, nos dejó una sensación perplejidad, de haber evidenciado un refinamiento poco frecuente. Nos retiramos con deseos de hallar creaciones de esta categoría en posteriores visitas.

Linea CONEXIÓN PACHA







Amuletos y tupus en Plata 925
SERPIENTES ESPIRALADAS BICEFALAS : prosperidad, abundancia y fertilidad. Posible derivación de un culto amazónico, donde existe una leyenda que habla de una serpiente que avanza con una cabeza bajo tierra que devora lo que allí encuentra y otra en el ciclo que regurgita de acuerdo a lo que la primera traga. Esta creencia coincide con la costumbre de alimentar la tierra durante las ceremonias a Pacha Mama, para propiciar bienestar futuro. Habría sido símbolo de prosperidad, abundancia y fertilidad. Su forma espiralada estaría aludiendo a fuerzas en permanente movimiento y oposición: caminos de ida y vuelta que marcan ciclos inexorables de la vida.

HUACA EN CEREMONIA : ( sacerdote, hombre relacionado con lo sagrado) Conexión con lo divino, protección. Aparentemente en los unkus o ponchos se ostentaban los símbolos de linaje. Los personajes con unkus presentan diseños de diferenciación .Es posible que se trate de personajes jerárquicos o chamanes en ceremonia. A veces tienen ambos brazos en alto ,lo que podría estar mostrando una actitud que algunas comunidades actuales practican para elevarse en plegaria al gran espiritu o representar una pose de exaltación chamánica muy común en la iconografía de toda América.